Apr 2, 2024
¿Te ha pasado por la mente que estarías mucho mejor si pudieras escuchar mejor a tu cuerpo?
A veces creemos que esto puede ser un don que solo tienen las personas muy privilegiadas, o que se dedican al Yoga o meditaciones.
A veces nos llegamos a creer que escuchar a nuestro cuerpo no es accesible para nosotras.
Alerta si se te viene a la mente el: "tengo que", "no sé", "ya sé"
Considera que:
1. Tu cuerpo es único
2. Las necesidades de tu cuerpo y circunstancias
cambian
3. Nadie tiene mejor acceso a las señales de tu cuerpo
más que tu
Puede no ser cómodo ni fácil, ES POSIBLE y Puedes Hacerlo.
Si quieres apoyo para lograrlo, te invito a estar en primera fila y estar en nuestra lista vip, inscríbete en: www.monicasosa.com/listavip
Transcripción del episodio completo.
Hola, hola, como siempre es un placer saludarte y recibirte en
el podcast de Puedes hacerlo.
Este es el espacio que te ayuda a lograr tu peso ideal, enamorada
de ti.
Mi nombre es Mónica Sosa, yo soy tu coach y este es el episodio
número 255 titulado “Lo que no te deja escuchar a tu cuerpo”
Esto de escuchar a nuestro cuerpo, que muchas veces lo idealizamos,
lo vemos como algo que ya quisiera algún día.
Si, yo pudiera escuchar a mi cuerpo, mi historia con el peso sería
diferente, mi relación con la comida sería diferente, mi salud
sería diferente, mi peso sería diferente.
Cómo me vería, cómo me hablaría, cómo viviría sería diferente si
tan solo yo pudiera escuchar a mi cuerpo.
¿Te ha pasado por la mente esto?
A lo mejor ni siquiera son frases que nos decimos, pero sí podemos
tener esa creencia de que uy, si es que hay gente que escucha su
cuerpo y pensamos que esto es un don que tienen algunas personas
muy privilegiadas.
Para mí, el tema de escuchar al cuerpo, era para la gente que se la
pasa en meditación y yoga y a lo mejor yo pensaba a lo mejor esto
es para personas que han tenido como un tipo de alimentación muy
específica durante su vida, las personas que han sido muy
disciplinadas, las personas que, pues que han sido educadas de
alguna manera.
Es como que a veces pensamos que este concepto de escuchar a tu
cuerpo es no accesible para mí o al menos no es algo que que yo he
pensado que pueda ser como que, como que yo, yo escucho a mi cuerpo
y podemos tener.
Voy a compartir una reflexión acerca de esto, de lo que no nos deja
escuchar a nuestro cuerpo.
Voy a compartir errores que noto que están así como que creo que no
nos damos cuenta que cometemos y esto es lo que realmente no nos
permite escuchar a nuestro cuerpo.
Voy a compartir algunos tips para escuchar a nuestro cuerpo y para
darnos cuenta de que esto es una habilidad disponible para todo el
mundo.
No es para los health coaches, no es para la gente que está súper,
que medita todo el tiempo y hace yoga y está en zen y que ha tenido
una vida súper saludable.
Esto es algo disponible para todos.
Es algo que está simplemente en nosotros.
El tema es que por supuesto, por el tema de las dietas, por el tema
de escuchemos una cosa que alguien hace y ahí vamos o de repente
por compromisos sociales, por seguir ciertas reglas, por lo que
debe de ser, por seguir ciertas modas, por obedecer, por
complacer.
Nos acostumbramos a hacer todo menos escuchar a nuestro cuerpo.
Y si cuando no escuchamos a nuestro cuerpo, bueno, estamos en este
proceso.
Y lo que yo comparto es todo lo referente al tema de lograr el peso
ideal en paz y el peso ideal.
Yo siempre digo, últimamente lo he como recalcado más, el peso
mental es el que más nos abruma y es el que más cuesta quitarnos,
más cuesta soltar.
Y el tema de escuchar a nuestro cuerpo nos permite soltar ese peso
mental, conectar con nuestro cuerpo y crear la versión de nosotras
que nos sentimos llamadas a crear.
Así es que me voy directa a compartir ciertos errores que bueno, al
menos yo te puedo decir, yo no había considerado que eran
errores.
Son maneras de ver este tema de escuchar al cuerpo, que me parece
un tema importante a que hablemos y que nos aclaremos lo que es
escuchar al cuerpo, lo que no es escuchar al cuerpo, lo que no
tiene nada que ver y sobre todo, bueno, vuelvo al tema de voy a
compartir algunos errores que solemos cometer o ideas que nos
solemos como creer, con las que nos confundimos y nos desconectamos
de esta posibilidad que es accesible para todo mundo y que es es
necesario y que es importante escuchar a nuestro cuerpo.
Voy a hablar de lo primero.
Esta pregunta que yo invitaría a que a que reflexionaríamos.
¿Yo te diría, te has preguntado alguna vez sé escuchar a mi
cuerpo?
¿Yo escucho a mi cuerpo, sé escuchar a mi cuerpo?
¿Yo te preguntaría sabes escuchar a tu cuerpo?
¿Te lo has preguntado?
¿Qué es lo primero que se te puede venir a la mente?
Y aquí de las respuestas que se nos puedan venir a la mente, porque
eso es un concepto que se utiliza mucho en este tema de
especialmente con el tema de bajar de peso, pero no nada más de
hacer dieta, sino todo lo que tiene que ver con el tema de
coaching, de mindset, de todo lo que tenemos transformación de
pensamientos, el aprender a escuchar a mi cuerpo.
¿Esta pregunta sé escuchar a mi cuerpo?
De entrada quiero invitarte a reflexionar y a darnos cuenta de que
esa pregunta de entrada ya nos pone en un en un punto para dar una
respuesta que no nos hace bien.
Voy a hablar de las respuestas que se nos pueden venir a la mente y
váyanme compartiendo.
Bueno, es que estoy compartiendo en vivo el podcast con las
participantes de Puedes hacerlo espectacular.
Después vamos a una reflexión y tendremos tiempo para discutir este
tema, pero vayan compartiéndome qué les va pareciendo o si les va
cayendo el 20 con respecto a estas respuestas que solemos darnos
ante el sé escuchar a mi cuerpo.
¿Cuál es la conversación que tienes contigo?
¿Sueles repetirte un tengo que aprender a escuchar a mi cuerpo?
Debería de aprender a escuchar a mi cuerpo.
Notemos que esto de esta exigencia, este que tiene todo que ver con
un con una idealización, con un querer ser mejor, con un querer
estar como más conectada conmigo.
A veces estos pensamientos de tengo que aprender a escuchar mi
cuerpo, lo único que no refuerza es un yo no escucho a mi cuerpo,
yo no tengo estabilidad, yo no sé cómo hacerlo.
Este tengo que escuchar a mi cuerpo, tengo que aprender a escuchar
a mi cuerpo.
Es un pensamiento que no nos hace bien.
Lo he compartido muchas veces y si es la primera vez que me
escuchas en el podcast, creo que es uno de los conceptos más
importantes con respecto al tema de alerta de los pensamientos que
te repites, porque ahí está la clave, ahí está la clave de los
obstáculos y de por qué a veces es tan difícil el camino cuando nos
repetimos el tengo, cuando nos movemos nosotras mismas sobre el
tengo que, tengo que aprender a escuchar a mi cuerpo, tengo que
hacerlo bien, tengo que bajar de peso, ya tengo que dejar el
azúcar, tengo que bajar medidas, tengo que bajar la panza, tengo
que bajar las piernas, tengo que mover mi cuerpo.
El tengo solamente nos estresa y nos reafirma un espacio en donde
estamos, que es un espacio negativo.
Ese tengo no nos sirve de nada.
En el tengo que aprender a escuchar a mi cuerpo nos coloca en un
espacio de no sé cómo hacerlo.
Con lo cual este pensamiento que nos coloca en el no sé cómo
hacerlo, vamos a darnos cuenta como el no sé, porque también esa es
una respuesta muy común, es que yo no sé y a mí me lo comparten y
sé lo que es estar ahí.
Yo he estado mucho tiempo en el no sé y se los he compartido y he
hablado también mucho del no sé.
Cada vez que utilizamos el no sé, nos debilitamos de alguna manera
nosotras mismas, nos imposibilitamos.
El no sé nos desempodera y no que no creo que no es tan importante
el tema de las palabras como a veces las utilizamos.
En lo que quiero que más nos enfoquemos y tú que me estás
escuchando, enfócate en la energía que genera esto que te estoy
compartiendo, porque puede ser que tú genuinamente tu energía es no
sé, pero voy a aprender, no sé, pero ahorita mismo decido y ahorita
mismo conecto conmigo y ahorita mismo descubro y ahorita mismo
pruebo esto.
Entonces es un hay una gran diferencia en algunas palabras, sobre
todo lo que quiero que ahorita que estoy compartiendo obstáculos y
errores que cometemos más que clavarnos en las palabras, porque si
las palabras tienen mucho poder, ubícate y concéntrate en la
energía que estas palabras que estoy compartiendo nos pueden
generar, la energía del tengo que, la energía del no sé, cómo nos
desempodera esta energía que solamente nos hace buscar qué hace
alguien más, compararme, sentirme menos, sentirme a veces
tonta.
Esto lo digo por mí.
Esto era el mi sentimiento.
Es como que yo no sé, yo no sé qué debería de comer, no sé qué le
hace bien a mi cuerpo, no sé cuándo parar, no sé por qué no puedo
controlarme, no sé, no sé, no sé.
Nos desempodera.
Vuelvo que el tema de las hay que atender el poder de las palabras,
pero sobre todo conecta con la energía de lo que te repites, porque
a veces no es que textualmente tienes esto, pero sientes.
Está esta energía de sentirte menos, de sentirte desempoderada, de
sentir que no sabes, de sentirte que tienes que hacer lo que
alguien más, de sentirte menos que alguien.
Eso es la energía del no sé.
También está la energía del ya sé, ya sé que es no es el ya sé, es
que el ya sé tiene dos tonalidades y por eso hablo de te quiero
llevar a que reflexionemos en la energía de lo que nos
repetimos.
El ya sé tiene la tonalidad del ya sé todo.
Entonces no estoy aprendiendo, no me abro a la posibilidad de
aprender.
Es que ya lo sé.
Es un ya sé.
Entonces energía de arrogancia, de realmente yo ya no necesito
saber nada, ya lo sé todo, ya hice todas las dietas, ya sé
todo.
Entonces me cierro.
Muchas veces esa el tener tantos, tantas experiencias, tantas
caídas nos puede colocar en el ya sé.
Vas a escuchar, de pronto escuchas no sé, una propuesta que te
vengo a hacer.
Ves como el no sé este no tiene una energía negativa, sino es como
más bien de creatividad, pero el el ya sé, yo ya lo sé, ya lo probé
todo, ya sé que a mí nada me funciona, ya sé que lo único que debo
de hacer es cerrar la boca.
Ya lo sé.
Nota como hay una energía del ya sé que nos cierra, que nos no nos
deja crecer, no nos deja aprender, nos cierra la posibilidad de
seguir aprendiendo, de seguir haciéndonos.
Ahora hay un ya sé que también es un ya sé.
Es una energía totalmente desempoderadora y es esta energía que
dice que es como del ya sé y lo sigo haciendo.
Es que yo ya sé que debería de parar en cierto momento y lo sigo
haciendo.
Es como ya lo sé.
Al final es un me justifico.
El ya sé, él no sé es me justifico.
Tengo siempre una respuesta.
En lugar de simplemente abrirme a nuevas posibilidades, el seguir
haciéndome, seguir creciendo, en lugar de bloquear el crecimiento,
en lugar de bloquear la conexión con nosotras mismas.
Y ahorita voy a hablar de lo que nos puede ayudar, de lo que
verdaderamente nos ayuda conectar con esta capacidad que todos y
todas tenemos de conectar con nuestro cuerpo, que no tiene nada que
ver ni con el nivel de estudios, ni con el nivel de conocimientos
de los alimentos, de la nutrición, de los macros, micros, todo lo
que sabes no tiene nada que ver.
No es necesario tener todos estos degrees, todos estos
conocimientos para aprender a escuchar a nuestro cuerpo.
Es una habilidad que tenemos y ahorita, como ya lo dije, voy a
hablar de qué es lo que nos puede ayudar a hacer esta conexión,
pero estoy hablando de lo que no nos ayuda y hablo de este de estos
pensamientos que tienen que ver más con la energía.
Hablo de pensamientos, de palabras que puede ser que cada quien
utilicemos diferentes palabras.
Da lo mismo las palabras que estemos usando mientras nos estemos
bloqueando, mientras nos estemos cerrando, mientras nos estemos una
forzando a hacer algo que yo no soy capaz de hacer.
Es como que es algo que no es para mí.
Ese es el tengo que.
La energía del no sé es pues yo no sé nada.
Yo no tengo estos privilegios.
Yo no supe, no me enseñaron.
Yo no crecí sabiéndolo.
Yo no tengo idea.
Yo estoy bien desconectada con mi cuerpo.
Yo no sé eso es como el no sé cómo hacerlo.
Me desempodera y él ya sé que tiene dos.
Ya lo dije, como dos, dos caminos o dos miradas.
Él ya sé de ya lo sé todo.
Y entonces me cierro a un.
Porque aunque sepamos nosotras, aunque ya tengamos esta conexión
con nuestro cuerpo, es importante recordar que nosotras mismas
vamos cambiando en la vida, nos seguimos haciendo en la vida,
seguimos aprendiendo de nuestras nuevas necesidades y también este
ya sé de ya lo sé y aún así sigo siendo el peor de los casos.
Está es el ya sé que me juzga.
Al final son simples reacciones.
Hay personas que están muy acostumbradas a no les gusta.
Es como es muy incómodo muchas veces reconocer que algo no lo estoy
haciendo bien y muchas veces la respuesta es justificarme, tener
una respuesta para todo y justificarme y defenderme.
Lo único a la única persona que se desempodera somos nosotras
mismas.
Cuando tenemos esta respuesta ya sé, ya sé.
O sea, ya me cierro.
¿Escucha, es como cómo puedo escuchar a mi cuerpo?
Ay, no, ya sé, ya sé, ya sé, ya sé lo que tengo que hacer.
Lo que pasa es que no lo hago.
Es que no sé cómo hacerlo.
Es que es que ya sé, ya sé, no necesito aprender nada.
Notamos la diferencia, pero notamos cómo es que es algo a lo que
digamos es es muy bien visto, es muy común, es parte de nuestra
cultura este tema.
Ahora lo que quiero nombrar aquí y antes de nombrar que es
precisamente el cómo si, como si conectar con esta habilidad que
todas tenemos y todos tenemos de poder escuchar a nuestro
cuerpo.
Lo que sí quiero decir es esto es algo que ya lo tenemos, pero vaya
que por nuestra cultura, por el tema de las dietas, por el tema de
la presión social y el people pleasing y todo esto que lo que
muchas nos hemos acostumbrado, pues nos hemos desconectado de esta
habilidad, la hemos perdido, no la hemos desarrollado al
máximo.
Y bueno, puedes hacerlo.
A mí me complace decirles que justo nuestras herramientas son como
el elemento clave para conectar más y más con esta habilidad.
Es que las chicas después hacerlo lo saben, no es algo que de la
noche a la mañana ya está conecto y es como es algo que ya tengo,
no es algo que conecto, ya lo master y sé.
Es algo que ya tenemos a lo que hay que ir accesando una y otra y
otra vez y de pronto utilizamos una herramienta y otra y de ahí
seguimos como nutriéndonos.
Creo que algo de lo que que realmente hace grandiosa la posibilidad
de seguir escuchando nuestro cuerpo y seguir, seguir, seguir a
niveles de me ayuda no nada más a bajar de peso, me ayuda a crear
más salud, me ayuda a incluso solucionar algunas, algunos síntomas,
algunas, incluso algunas enfermedades, evitar algunas enfermedades,
sentirme simplemente más espectacular esto de poder conectar con
esta capacidad que tenemos de escuchar a nuestro cuerpo.
Algo maravilloso que quiero decir antes de lo que te voy a
compartir hoy para que consideres que tú sí puedes escuchar a tu
cuerpo.
Lo que sí quiero decir es que dentro de puedes hacerlo espectacular
con el acompañamiento, con el coaching, con las herramientas.
Esto simplemente es una habilidad que llegas a masterizar.
O sea, es que te haces experta en ti misma y tienes toda esta
confianza.
Pero bueno, voy a compartir aquí, como lo prometí, voy a compartir
específicamente tres puntos nada más con el puro mencionarlo y
reflexionarlo te vas a dar cuenta y te va a permitir tener esta
claridad de que tú sí puedes aprender a escuchar a tu cuerpo.
Tres puntos a considerar.
Punto número uno, considera que tu cuerpo es único, que no hay
nadie más como tú, absolutamente nadie como tú, con lo cual es es
que no tiene ningún sentido esperar que lo que a alguien le da
saciedad te tiene que dar saciedad a ti, lo que a alguien le sirve
para bajar de peso te tiene que servir a ti.
Tu cuerpo es único y tú sí tienes todo para poderlo escuchar, pero
es importante saber que tu cuerpo es único, que tus punto número
dos, tus necesidades y tus circunstancias de vida son únicas.
Eso es parte del soy única.
Y otra es que vamos cambiando en el tiempo, que lo que
necesitábamos cuando éramos unas adolescentes, cuando éramos unas
jovencitas.
Bueno, yo como ahorita estoy ya entrando entre Acabo de cumplir mis
50 años, ya hablo como una mujer madura y mayor.
Ya no es, no son las mismas necesidades que tenemos a los 50, que
tenemos a los 20, que tenemos a los 30.
Nosotras mismas la semana pasada que nos dio gripa, ahora que está
haciendo frío, ahora que estoy cansada, ahora que estoy
desvelada.
Las necesidades y circunstancias de nuestro cuerpo, que nuestro
cuerpo está experimentando cambian.
Y me voy al punto número tres.
Nadie tiene mejor acceso a las señales de tu cuerpo más que tú.
¿Entonces, por qué esperamos o por qué pasamos tanto tiempo en
Instagram?
Hay quienes me dicen es que no, yo no tengo tiempo para ver, no
tengo tiempo para ver los módulos, no tendría tiempo para hacer tu
programa, no tengo tiempo.
Pero a veces esas mismas personas me dicen hombre, me la paso horas
en el instagram y me encantan los tips y las recetas de no sé quién
y hago todo al pie de la letra y nada y no me funciona, pero sigo,
sigo, sigo.
Y si ese tiempo mejor se lo dedicamos a escuchar esas señales que
me está dando mi cuerpo, esas necesidades que que hoy estoy
experimentando.
Estoy familiarizada con mi sensación de saciedad, estoy
familiarizada con mi sensación de hambre, de lo que es realmente
tener hambre.
Estoy familiarizada con la sensación.
¿Tengo muy claro cuando estoy cansada, cuando necesito realmente
parar, irme a tomar una siesta, dormirme más temprano, cuando
necesito realmente hidratarme, cuando necesito realmente mover mi
cuerpo, qué tanto tiempo le dedico?
Que no estoy hablando de volumen de tiempo.
Es como que tanto atiendo esto que es realmente clave, porque nadie
tiene acceso a las necesidades de nuestro cuerpo más que tú, como a
las necesidades de tu cuerpo nadie las conoce mejor que tú.
¿Por qué estar buscando en otras personas, en las necesidades, en
las, en de alguna manera las reacciones de otros, de otros
cuerpos?
Es como que me hace sentido.
Es que el escuchar a nuestro cuerpo está en nosotras mismas.
A partir de reconocer que somos únicas, que nuestras necesidades y
nuestras circunstancias cambian y de que nadie sabe mejor que
nosotras mismas lo que lo que estamos sintiendo.
A partir de ahí tenemos como esta.
Podemos hacer esta conexión con Ok, entonces me voy a hacer cargo,
entonces voy a buscar si alimentarme, usar mi sentido común, darme
cuenta.
Algo que nos puede ayudar siempre es un diario de alimentos.
Ir siguiendo mi diario de alimentos en el tiempo.
El diario de alimentos es una verdadera joya.
Es es una joya apreciadísima porque luego en el tiempo tenemos toda
esta información.
Ah, ya me caché.
Hay quienes me decían hace poquito alguien de ustedes espectacular
me contaba ya me caché cada vez que me va a bajar, antes me
inflamo, antes tengo muchísima hambre.
Es ahí cuando ahora he aprendido que es el momento en donde
necesito comer más.
Luego me doy cuenta que son días en donde no necesito tanta
comida.
Son los días geniales para ayunar.
Esto lo voy descubriendo yo.
Los días que son geniales para mí hacer ejercicio, cuando después
me voy descubriendo y voy conociendo que mi cuerpo va cambiando las
necesidades que voy teniendo yo.
Hoy lo que quiero compartir es que esta habilidad de escuchar a
nuestro cuerpo no es algo que tú tienes que saber, no es algo que
no sabes o que ya sabes, simplemente es una decisión.
Hoy conecto con mi cuerpo, hoy decido escuchar a mi cuerpo.
Hoy lo atiendo.
Ábrete a las maravillosas respuestas que depende que de ti para ti
salen cuando conectes con tu cuerpo y con esta capacidad hermosa
que tienes de escuchar las necesidades de tu cuerpo.
Quédate.
Hoy yo te digo y es chicas, después de hacer espectacular, saben,
se los digo una y otra vez.
Yo no estoy diciendo que esto es cómodo, puede ser bastante
incómodo y tampoco estoy diciendo que sea fácil.
Lo que sí les quiero decir y lo quiero confirmar y yo sé, todos los
días tengo la oportunidad de ver testimonios en donde comprobamos
que esto es totalmente posible y accesible para todas.
Es cuestión de disponernos a dejar de conectar con esa energía de
yo no sé, tengo que hacerlo, ya sé, ya sé, ya sé o ya sé y soy el
colmo.
Dejemos de lado esa energía que no nos sirve y vamos a conectar con
esta decisión de hoy escucho a mi cuerpo, hoy escucho a mi
cuerpo.
Y si lo primero que se te viene al escucharme ahorita es es que sí
suena muy bonito, pero no sé ni cómo por dónde empezar, asegúrate
de estar en primera fila en esta lista vip que tenemos, porque muy
pronto voy a abrir las puertas de Puedes hacerlo Espectacular, el
programa en donde vaya que si tendrás todas las herramientas y
verás qué fácil es reconectar con esta capacidad, esta habilidad
que tú ya tienes, no escuchar a tu cuerpo.
Y a partir de ahí, por supuesto, vas a darte cuenta que es
inevitable lograr tu peso ideal, hacer la paz con la comida,
contigo misma y disfrutar tu vida.
Vivir espectacular es totalmente posible para ti, con lo cual no
estás en puedes hacerlo espectacular.
Inscríbete ya mismo, ve a apuntarte a esa lista de espera.
Es una lista vip que además al inscribirte tienes, recibirás un
regalito por ahí muy especial que me han estado diciendo que les ha
encantado ese regalito.
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Inscríbete ya mismo para que tengas la primicia cuando
empecemos, cuando abra las puertas nuevamente del programa y si
eres parte de Puedes Hacerlo Espectacular, pues no te pierdas
nuestros encuentros, sigue gozando el camino, sigue usando la
experiencia de escuchar a tu cuerpo, sigamos renovando este
pensamiento aparte de un solo momento, una pausa, respiro profundo,
dejo esos errores del pasado, esos hábitos de tengo que escuchar mi
cuerpo, es que yo no sé cómo hacerlo, es que yo ya sé cómo hacerlo,
soy el cómo.
Dejemos eso a un lado, toma la decisión de renovar este sí quiero,
sí quiero vivir espectacular, sí quiero encontrar cómo poder crear
esta versión de mí que me siento llamada a crear.
Conecta y repítete un hoy escucha mi cuerpo, que sea la decisión
que tomes y descubre las maravillosas posibilidades a las que vas a
ir accesando a partir de tomar esta decisión de hoy escucho a mi
cuerpo.
Repítetelo varias veces, hazlo genuinamente y disfruta tu
camino.
Vuelvo la lista de espera, esa lista vip monicasosa.com/listavip,
por ahí te espero.
Y chicas de Puedes Hacerlo Espectacular, por supuesto seguimos
gozando nuestro camino y a seguir viviendo espectacular.
Así es que me despido esperando que tengas un día, una semana y una
vida espectacular.
Hasta la próxima.